domingo, 15 de agosto de 2010

Construccion de una Cantarera

 

 Cantarera

Estos muebles, en su origen, estaban destinados a soportar los cántaros de barro en los que se hacía acopio de agua en las casas, y que además la mantenía fresca, ya que las viviendas aún no tenían tuberías que la llevasen a su interior.

Hoy en día se les ha reconvertido en objetos ornamentales donde pueden colocarse las mencionadas vasijas, o sustituirse por tiestos con plantas.

Su diseño es sencillo, con visos de viejo, y tosco, primando la desnudez de la madera y la falta de ornamentación.

Vamos a desarrollar un modelo, que puede variarse a otras necesidades o caprichos.

Plantillas:

cantarera-2.jpg

Comenzaremos haciéndonos unas plantillas con cartón rígido.

Una será un rectángulo de 6,7 x 4,3 cm (2.64 x 1.69 in), en la que trazaremos una línea entre dos ángulos opuestos.

Se hace notar que es de la misma medida que el canto de la madera escogida.

A 2 cm (0.79 in) de borde, hacemos un pequeño orificio en cada parte donde coincide con la bisectriz trazada. Cada cara las identificamos con A y B.

En las fotos adjuntas se puede ver cómo construirlo y cómo quedará luego, cuando lo taladremos.
Verlo en la foto adjunta.

Ahora tomamos otro trozo de cartón y trazamos una línea a lápiz, sobre la que marcamos un punto.

Con un compás tomamos una medida de 5 cm (1.97 in) de radio, pinchamos en el punto A y hacemos un semicírculo.

Pinchando ahora en B, con un radio de 6 cm (2.36 in) marcamos el punto C.

Unimos A con C y ya tenemos el ángulo que necesitamos para la inclinación de las patas.

Con unas tijeras cortamos por la línea A-C hasta D, y luego A-B hasta E.

Y ya tenemos las dos plantillas necesarias.

La madera

Y pasamos a preparar la madera, que aquí lo hemos hecho con maciza: de 6,7 x 4,3 cm (2.64 x 1.69 in).

Los dos largueros superiores tienen 123 cm cada uno (48.43 in).

cantarera-3.jpg

Sus cuatro travesaños miden 27 cm cada uno (10.63 in).

Para las cuatro patas nos haremos con una madera de, por lo menos, 200 cm de largo (78 in), y planificamos los cortes de 46 cm (18.11 in) cuatro veces.

cantarera-4.jpg

Luego aplicamos la plantilla angular (ver con detalle la foto), marcamos con lápiz, y serramos todo.

Con estos cálculos, al final la medida de suelo a la parte superior nos quedará a 44 cm (17.32 in).

Preveremos también de unos 3 m (117 in) de madera redonda de 1,2 cm (0.5 in) de diámetro.

Largueros superiores

Hallamos el punto medio de longitud de cada larguero (61,5 cm – 24.21 in) y desde ese punto medio, hacia la derecha y luego hacia la izquierda, marcamos a lápiz las medidas en cada lado más estrecho del larguero:

cantarera-6.jpg

13,5 cm – 20,2 cm - 47,2 cm – 53,9 cm (5.31 in – 7.95 in – 18.58 in – 21.22 in)

Y con la plantilla rectangular y un punzón o clavo, señalamos los dos puntos que nos van a servir para colocar los travesaños.

Ahora marcamos a lápiz una distancia de 15 cm (5.91 in), desde el extremo de cada larguero, en el costado más estrecho, para encastrar las patas.

Aplicamos en este punto la plantilla angular y trazamos la línea con lápiz.

cantarera-7.jpg

Sobreponemos otra madera y trazamos la paralela.

cantarera-5.jpg

En cara superior del larguero, marcamos, y a 2,1 cm (0.8 in) señalamos para hacer la caja.

Procederemos de igual forma con las patas, para hacer los rebajes para unir.

En los puntos señalados con el punzón en los extremos de los travesaños, con una broca para madera del 12 (4.7 in), hacemos taladros de 4,5 cm (1.8 in) de profundidad. (Total 16 orificios).

Con la misma broca, en los costados de los dos largueros, para luego montar los travesaños, hacemos taladros de lado a lado. (Total 16 taladros).

cantarera-8.jpg

Ahora, con sierra para madera, escofina y lima, hacemos las cajas en los largueros y las patas, para encastrarlas.

Terminadas las cajas, empatamos cada pata con un lugar del larguero, una a una, las sujetamos con un gato, las identificamos con lápiz para luego saber dónde ha de ir cada una, y hacemos dos taladros, de exterior a interior, pasantes.

No queda mas que armarlo con piezas de madera redonda cortada a 11 cm (4.3 in), que introduciremos a golpe de maza o martillo, después de haberlas dado cola blanca para madera, mejor trasparente, con una brocha.

Las partes de redondos que pudieran asomar como sobrante, los cortaremos y lijaremos para dejarlos a tope.

Es conveniente que en la parte de abajo de las patas, donde toca al suelo, pongamos una goma clavada o plástico, más pequeña que la base de la pata, que le sirva de aislante a la humedad del suelo.

Completaremos el trabajo dándole varias manos a todo con un producto protector de maderas, pues no es necesario pintar y mucho menos barnizarla, pues lo suyo es verse la madera al natural.


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